
¿Conoces la gerontología?
Probablemente hay momentos en los que vivimos tan metidos en nuestras rutinas y nuestros quehaceres diarios que se nos olvida que el tiempo transcurre de manera inevitable, mientras el reloj sigue su paso indetenible. Llegará un día en el que no estemos o no nos sintamos tan jóvenes, por lo que de alguna manera requeriremos del apoyo de alguien para poder continuar y hacer otro tipo de actividades propias de nuestra edad. De ese tipo de cuidados y apoyo se encarga un gerontólogo, pero ¿sabías de la existencia de esta profesión? A continuación, te damos algunos datos para que sepas de qué se encargan.
Aunque muchas veces se pase por alto, lo cierto es que cada vez es más usual ver que muchas personas mayores, sobre todo las de tercera edad, se quedan solas. Independientemente de cuál sea el motivo, es una situación que requiere de toda nuestra atención y es por eso que muchas personas optan por estudiar gerontología, como una manera de ofrecer un apoyo y contribuir a mejorar la calidad de vida de estas personas.
¿Qué hace un gerontólogo?
Los profesionales de esta área se encargan de realizar estudios para encontrar nuevas alternativas que les permitan mejorar los cuidados ofrecidos a las personas de edad avanzada, así como mejorar sus posibilidades dentro de la sociedad, ya que con los años se van perdiendo las habilidades físicas y cognitivas. Para ser un gerontólogo es necesario que la persona posea diversas perspectivas profesionales que le ayuden a analizar con detenimiento el proceso de envejecimiento para así poder atenuar los síntomas.
Según información publicada en el sitio web Universia, el término fue propuesto por Michel Elie Metchnikoff, sociólogo y biólogo ruso, quien lo plasmó en el libro The Nature of Man, donde definía a la gerontología como un “estudio científico de la vejez”. Aunque algunas veces se compara a la gerontología con la geriatría, la verdad es que la gerontología abarca un espectro mucho más amplio, donde se contemplan estudios de biología hasta los factores que intervienen en el envejecimiento, así como el impacto que tiene en la sociedad.
Generalmente quienes optan por estudiar gerontología tienen la oportunidad de formarse en diversas áreas, lo cual les permite contar con las herramientas y conocimientos necesarios para abordar diversos aspectos y situaciones como, por ejemplo, poder acercarse a las personas mayores para conocer sus problemas y de esta manera guiarles para que puedan afrontarlos y solucionarlos adecuadamente, siempre acorde a sus posibilidades. La clave es que estos profesionales puedan influir de manera positiva en la vida de las personas mayores brindándoles atención integral a través de acciones médicas, psicológicas y sociales.
Las funciones de estos profesionales son diversas, sin embargo, mencionamos algunas de las más relevantes:
- Promover la educación acerca del envejecimiento y cómo esto debe formar parte de nuestras vidas.
- Proponer estrategias que permitan la inserción de manera activa y participativa de las personas mayores dentro de la sociedad.
- Diseñar planes y programas de intervención gerontológica que contribuyan a fomentar el aprendizaje del proceso de envejecimiento.
- Ofrecer apoyo e impulsar acciones que promuevan la salud de las personas mayores a través de la gerontología.
Una de las cosas más importantes, al momento de comenzar a formarse dentro de esta profesión, es saber que realmente existe una vocación por ayudar a esas personas que requieren de cuidados especiales. Un gerontólogo debe ser por excelencia una persona empática y con sensibilidad para saber cómo y cuándo actuar, según la situación específica del momento. A continuación, mencionamos algunas carreras que se relacionan de manera directa con el estudio del envejecimiento y que pueden ser de mucha utilidad para mejorar la calidad de vida de las personas mayores.
Psicología. Una carrera de mucha importancia, sobre todo cuando se trata de analizar el cambio de relación por el que suelen atravesar las personas de la tercera edad con respecto a su convivencia con los demás. Conforme el ser humano va envejeciendo, es usual que aparezcan algunas enfermedades mentales, de ahí la importancia de acudir a terapias psicológicas que ayuden a mejorar la relación de estas personas con su entorno al contrarrestar los efectos en el aparto cognitivo como falta de memoria, así como problemas de aprendizaje y concentración.
Biología. Otra alternativa que puede ser de mucha ayuda para ver esta realidad desde una perspectiva más científica. En este caso, los biólogos, geriatras y genetistas suelen estudiar la manera como el cuerpo humano va evolucionando y cómo se transforma una vez se va llegando a edades avanzadas, de esta manera se pueden determinar nuevas formas para disminuir los efectos del envejecimiento desde un matiz médico y científico.
Enfermería. Sin duda una profesión que es muy demandada al momento de optar por estudios gerontológicos, ya que los conocimientos que se adquieren en este ramo son esenciales para prestar atención y cuidados óptimos a las personas de la tercera edad. Se trata de una carrera que requiere de mucha vocación, por lo que combina perfectamente con la gerontología.
Trabajo Social. Fundamental para ofrecer un trato adecuado a las personas mayores, ya que usualmente la sociedad olvida que los adultos mayores requieren de cuidados especiales por lo que es necesario prestar mucha atención para evitar dejarlos de lado. La gerontología le da mucha importancia al trabajo social, ya que se encarga de estudiar con detenimiento los problemas que puede ocasionar el envejecimiento en las personas y así encontrar nuevas vías para solventar la situación.
Los gerontólogos pueden trabajar en diversas áreas, por ejemplo: en residencias o casas dedicadas al cuidado del adulto mayor, en clínicas, hospitales o centros asistenciales, en centros de investigación, instituciones independientes que ofrecen cuidados médicos y de forma privada en los hogares de las personas mayores.
Por GGBA
