Si prestamos un poco de atención podremos notar que el área de Recursos Humanos de una empresa no es la sombra de lo que era hace unas pocas décadas, y es que los tiempos han cambiado logrando ejercer influencia en la manera cómo funciona este departamento. ¿Quieres saber cuáles son esos factores que han llevado a los profesionales de esta área a transformarse y reinventarse? Continúa leyendo para tener una perspectiva más clara al respecto. 

Empecemos por el nombre. Anteriormente en la mayoría de las empresas se les conocía como departamento de Recursos Humanos, sin embargo, en la actualidad se les puede encontrar bajo la figura de Reclutamiento y Selección, Talento y Personas, Cultura y Personas, entre otras, que reflejan un poco más el estilo de pensamiento y lo que se busca hoy. Pero no es solo esto lo que ha cambiado, sino que también quienes se encargan de llevar las riendas del área tienen una misión quizás un poco más compleja. Ya no se trata solo de atraer el talento sino de tratar de ofrecer las mejores opciones para retenerlos dentro de la compañía.

La labor de los reclutadores está enfocada en ser cada vez más completos, es decir, conocer muy bien los requerimientos y necesidades estratégicas de las empresas donde se empeñan, así como mostrar interés y empatía por cada uno de los talentos que llegan a la organización para una entrevista laboral. Para esto también es necesario que se mantengan actualizados con respecto al tema tecnológico, ya que las nuevas tendencias hacen que sea necesario el manejo de programas de selección automatizados que permitan agilizar la labor de búsqueda. 

Tanto es así que, a nivel mundial, muchos institutos dedicados a la preparación de profesionales del área de talentos, han tenido que reformular sus cursos para que los niveles de enseñanzas se adecúen a las nuevas tendencias del mercado laboral. Hay quienes coinciden en que este nuevo programa de preparación de reclutadores debe incluir cuatro aspectos fundamentales: sensibilidad, estabilidad, inversión y transformación digital. A continuación, daremos algunos detalles para esclarecerlos un poco más. 

Sensibilidad. Se refiere a la capacidad que deben tener los reclutadores para ponerse en los zapatos, no solo de la empresa, sino también de los posibles talentos, como una manera de ver las dos caras de la moneda y tratar de que ambas partes resulten beneficiadas. Además, tienen la tarea de sensibilizar a los demás miembros de la compañía para que sean capaces de ver las cosas desde una perspectiva más positiva e incluyente.

Estabilidad. Tiene que ver con toda la parte estructural que debe tener el área de talentos de la empresa, pero ojo, no nos referimos a la parte física de un edificio como tal, sino a esa seguridad que pueden mostrar ante los demás y que hace ver a la empresa como una de las mejores opciones para trabajar allí. Ser estables en esta área implica conocer muy bien las estrategias de la empresa y lo que realmente quiere conseguir con sus empleados, esto no solo traerá buenos dividendos a la organización, sino que además le generará una muy buena reputación. 

Inversión. Acá es necesario que se termine de transformar ese pensamiento que se tenía del departamento de Recursos Humanos y, más allá de verlo como un gasto, es asumirlo como una inversión que beneficiará a la empresa, ya que al dedicarle más tiempo en conocer a profundidad los perfiles de los posibles candidatos, los reclutadores asegura que el personal contratado será es que mejores aptitudes y actitudes tiene, no solo para hacer frente a las actividades laborales, sino también a los posibles obstáculos e imprevistos de la vida. 

Transformación digital. No es menos relevante, ya que en la actualidad los buenos reclutadores deben preocuparse y ocuparse de mantenerse al día con las plataformas y herramientas necesarias que les permitan optimizar sus procesos de búsqueda de nuevo personal. Esto les sumará puntos y las empresas sabrán que cuentan con un personal altamente capacitado.   Lo ideal es que con el paso de tiempo los profesionales que se forman en esta área de reclutamiento de talentos, sean personas con una visión más estratégica de la vida y que logren alinear sus conocimientos en el área, con una mentalidad más humana acerca de los negocios. Que puedan adaptarse al entorno cambiante de las nuevas tecnologías y que sean capaces de comunicarse de una manera más sensibilizada con los posibles candidatos de una determinada vacante laboral, lograr influir en lo que es mejor para las empresas, saber organizarse tener una visión más amplia ante los posibles conflictos.  

Por GGBA

Fuente: https://elpais.com/elpais/2019/06/20/actualidad/1561031011_519519.html